5 de agosto de 2007

Los demonios de Bret


(Lunar Park. Bret Eston Ellis) Debe ser duro llegar a los 40. Justo en la mitad del paso por este valle de lágrimas, debe haber generosidades por las que felicitarse, culpas por las que atormentarse, logros capitalizados y cuentas pendientes que, se sospecha, difícilmente podrán ser saldadas. Ya se tuvo tiempo para ser un mal hijo y también para empezar a ser un mal padre. Debe ser una edad en la que hasta el más cínico y firme en las plantas de sus pies se ve obligado a evaluar lo que va de su vida. Bret Eston Ellis no escapó a todas estas suposiciones y con el material de esta crisis de la mediana edad escribió Lunar Park.
Ellis hizo de su balance personal una novela de terror, donde el fantasma de su padre le sigue arruinando la vida y los personajes de sus anteriores libros se corporizan para atormentarlo, amasijar gente y animales y, de paso, decirle que fue durante demasiados años malo y superficial.
También crea para la ficción un hijo que aún no tiene. Este vástago no querido (del que sospecha se lo encajaron, pero que en verdad es un hijo no reconocido de Keanu Reeves, el protagonista de la versión cinematográfica de su libro Menos que cero) le recuerda que, anestesiado de tanta merca en la sangre, no está preparado para querer a alguien.
El libro camina siempre en límite nebuloso entre la experiencia fantástica y la alucinación de un drogadicto pasado de vueltas. Tiene su cuota de misterio, chisme (a todo buen cholulo le encanta encontrar nombres de celebridades sembrados en toda la novela) y enseñanza moral.
Mientras el autor de American Psycho lucha con sus demonios y rellena las columnas de su debe y haber vivencial, nosotros los lectores nos divertimos con Lunar Park. De paso lo juzgamos, un poquito lo comprendemos y pensamos que, si decidimos comprar lo que nos vende en su novela, Bret es una porquería de tipo, pero un muy buen escritor.

No es por decir, pero...
Algunas preguntas con respuestas sospechadas


1. ¿Habla mal de mí el haber googleado a cada uno de los nombres propios que figuraban en el libro para conocerles la cara?
2. Lunar Park nombra por lo menos una marca en cada una de sus páginas: ¿Es un recurso literario para mostrar el consumismo de sus personajes o una buena manera de ganarse unos pesos extras de Ellis?
3. ¿Los norteamericanos son los aprendices superficiales de la ironía de sus papás los ingleses?
4. ¿La parodia es una forma de sermón, pero con onda?

2 comentarios:

Anónimo dijo...

respecto a las marcas, me acordé de una entrevista que salió en radar a stephen king. Cito:
"
-Cuando usted usa nombres de marcas en sus libros los críticos parecen especialmente molestos.
–Siempre supe que algunos tenían un problema con eso. Pero también sé que nunca voy a dejar de hacerlo, y nadie va nunca a convencerme de que estoy equivocado. Porque cada vez que lo hago, siento un pequeño ¡bang! adentro. Como si hubiera dado en el clavo, como un triple de Michael Jordan. A veces la marca es la palabra perfecta y cristaliza la escena. Cuando Jack Torrance está tomando ese Excedrin en El resplandor, uno sabe lo que es. Siempre quiero preguntarles a estos críticos, algunos son novelistas, otros profesores universitarios, ¿qué mierda hacen ustedes? ¿Abren su botiquín y ven botellas grises sin etiquetas? ¿Ven shampoo genérico, aspirinas genéricas? Cuando van al almacén y compran cerveza, ¿las latas sólo dicen “cerveza”? Cuando van al garaje y ven lo que está estacionado ahí, ¿qué es? ¿Un auto? ¿Simplemente un auto?

Y después me digo a mí mismo: “Apuesto a que es así”. Algunos de estos tipos, los profesores universitarios, cuya idea de la literatura se detuvo en Henry James y esbozan una sonrisa gélida si se les habla de Faulkner o Steinbeck, son estúpidos en lo que respecta a la ficción norteamericana y han hecho de su estupidez una virtud. Y cuando abren su botiquín, creo que deben ver botellas genéricas, y eso es un fracaso en la observación. Por eso, creo que una de las cosas que tengo la obligación de hacer es decir: “Es una Pepsi, ¿ok? No es una gaseosa. Es una Pepsi. Es una cosa específica. Digan lo que quieran decir. Digan lo que ven. Si pueden, hagan una foto para el lector”.
"
recomiendo toda la entrevista, está buena. Paso el link: http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/radar/9-3918-2007-07-01.html

feliz inauguración! besos :)

Anónimo dijo...

yo también ´quise googlear a todo el mundo!!! quién es la esposa, la "famosa actriz" esa??? sabés???
besos
de yanina.